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Te ha tocado la lotería de Navidad, ¡enhorabuena! Es momento de disfrutar de ese dinero, o de hacer algo sensato con él, como amortizar deudas, invertir y gastarlo en aquello que te haga feliz (probablemente en ese orden). Es un momento de celebración, en serio. Aunque si estás en este artículo es probable que te asalte la duda —la inquietud, tal vez— sobre el pago de impuestos en la lotería de Navidad. En primer lugar, déjame decirte que alegres más esa cara: solo pagas impuestos porque has ganado dinero. Lo tuyo es un «problema de ricos». Estaría encantado de tener ese problema. Sin embargo es momento de saber cuántos impuestos te toca pagar por el décimo, cómo se paga, y cómo funcionan los impuestos en caso de un décimo compartido, algo muy navideño y español. ¡Vamos!

¿Cuánto se queda Hacienda en la lotería de Navidad?

La Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), el nombre oficial y elegante para lo que llamamos Hacienda, se lleva un pellizco de tu premio de la lotería. A la hora de calcular cuánto has ganado con el premio de Navidad, debes tener en cuenta que, como ingreso en tu patrimonio, Hacienda querrá que contribuyas al Tesoro Público. A diferencia de lo que ocurre con el IRPF del trabajo, o los beneficios por inversiones (algo de lo que sabemos mucho en El euro extra) aquí Hacienda aplica un tipo único: el 20% de todo aquello que esté por encima de 40.000 €.

Vaya por delante que este artículo versa sobre el pago de impuestos en la lotería de Navidad, pero el funcionamiento es idéntico para el Euromillones, Primitiva y todos esos. Si es lotería, se le aplica este impuesto.

¿Cuánto se paga de impuestos en el Gordo, el segundo premio, el tercero…?

Vayamos a los datos específicos. Con tablas. Ojalá tengas la necesidad de consultar esta información, así que te lo pongo fácil. En primer lugar, hablemos de los premios de lotería, ¿cuánto toca en el Gordo, el segundo…? ¿Cuántos premios hay? Esas cosas.

Premio¿Cuántos?€ al número€ al décimo€ por cada euro
El Gordo14.000.000400.00020.000
Segundo11.250.000125.0006250
Tercero1500.00050.0002500
Cuartos2200.00020.0001000
Quintos860.0006000300
Pedreas179410001005

Y ahora, ¿cuánto se paga de impuestos de la lotería de Navidad? Como ya hemos dicho, el 20% de todo lo que supere los 40.000€ (ese cantidad queda exenta) de modo que pongamos dos ejemplos: uno si te tocase un décimo, otro si hubieras jugado una participación de 5€.

PremioImpuestos del décimo (€)Del décimo cobras… (€)Impuestos de la participación (€)De la participación cobras… (€)
El Gordo72.000328.00012.00088.000
Segundo17.000108.000031.250
Tercero2.00048.000012.500
Cuartos020.00005000
Quintos06.00001500
Pedreas0100025

¿Significa eso que los premios pequeños se libran de pagar impuestos?

No exactamente. Todo depende las cuantías. Los cuartos, quintos y la pedrea no llegan al mínimo que tributa. No obstante, es posible que tengas tantos boletos de cuartos y quintos que superen la cifra mágica de 40.000€. En caso de que multitud de premios acumulen una gran cantidad de dinero (de nuevo, ¡enhorabuena!), deberás pagar impuestos por la cuantía que exceda la exención de 40.000€.

¿Cómo se pagan los impuestos de la lotería de Navidad si el décimo es compartido?

Pese a los muchos problemas de compartir un décimo de lotería, se trata de una tradición navideña. Tanto, que el anuncio de este año insiste en ello. Aún más, en mi casa es habitual compartir el décimo del pueblo, de modo que estamos todos en el mismo saco. Por lo tanto, es momento de hablar de las fiscalidad de los décimos compartidos.

El proceso es similar: vas al banco a cobrarlo. La diferencia es que todos los participantes del décimo deben acudir al banco (o entregar un justificante firmado) para que el banco avise a Hacienda. En este caso, lo que hará el banco es retener la cuantía correspondiente al total del premio (el 20% de todo lo que supere 40.000€) y luego la entidad repartirá el restante de forma proporcional entre los agraciados. Es decir, primero se descuentan los impuestos, y luego se reparte. Nada de cuarenta mil para mí (libres), cuarenta mil para ti (libres), cuarenta mil para el primo (libres), etc. Primero se paga; luego se cobra.

¿Puede una persona cobrar el premio y luego repartirlo?

Mal asunto este de confiar un premio de lotería a otros, que todos hemos visto La comunidad (y sino, deberías), pero supongamos que ocurre. Em tal caso, se debe elegir un responsable para que recoja el premio, y este responsable debe ser elegido ante notario, para que conste cada uno de los participantes en el sorteo. Una vez este representante cobre el premio (menos los impuestos) los reparte entre los participantes. ¡Ojo! Lo del notario es importante, para que Hacienda no considere el reparto de dinero como una donación y se aplica el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.

¿Cómo no pagar impuestos de la lotería de Navidad?

Esta es una consulta muy habitual, así que la voy a responder. ¡No se puede! Si el premio es inferior a 40.000 €, no pagas impuestos, como ya hemos visto. Pero mayor cuantía, sí se paga. Hacienda funciona así, quiere su trozo de pastel. Sin embargo, hay quien siente una aberración infame hacia los impuestos… y quien hace negocio de ello.

Esto solo lo escribo porque me ha indignado descubrirlo. Existe una empresa llamada Laguinda (pero probablemente no sea la única) que te «asegura el décimo para que no pagues impuestos». Voy a mencionar un par de cosas rápidas sobre esta empresa (y similares).

  1. El negocio será legítimo, porque en realidad sí pagan los impuestos, lo que ocurre es que los pagan por ti.
  2. Por tanto, se trata de una aseguradora. Nada más. Contratar a Laguinda es contratar un seguro. Una empresa que usa el dinero de todos sus clientes para pagar los gastos de los desafortunados (desafortunados que deben pagar impuestos porque les ha tocado el Gordo).

Así que… ¡no! No existe forma de no pagar impuestos en la lotería de Navidad si ha tocado el Gordo, segundo o tercero. Cada uno debe contribuir con lo suyo. Aun así. ¡Enhorabuena! ¡Te ha tocado la lotería!

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Por Carlos Pérez Casas

Recoge los beneficios de sus novelas y los invierte en dividendos porque algún día le gustaría jubilarse.

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